Sueño, hambre,....

...y dolor de muelas (bueno, mejor dicho, de muela) y de regalo, en solidaridad con la muela (y por su culpa) un poco de dolor de oído.

Pues eso, hoy soy un poco piltrafilla (guardaos vuestros comentarios, he dicho que hoy y es sólo aplicable a hoy. El resto de los días soy la reina de los mares).

La culpa es de la muela del juicio, si de esas que según las teorías de Darwin deberían de ir desapareciendo. La cosa es que en mi caso, lejos de desaparecer, aparecieron hace unos años como elefantes en una cacharrería, y mi boca, ya abarrotada de inquilinos, no acepta más. Dice que no hay sitio y que no hay.

Asi que hace tiempo decidí ir a la consulta del señor dentista a ver qué me decia. respuesta del dentista: "Es que no tienes sitio para las muelas del juicio" (se habrá quedado usted calvo detrás de las orejas, señor dentista), hay que sacarlas.
"Las dos de arriba saldrán fácil, ahora, las dos de abajo, no te voy a engañar, esas van a doler, porque están atravesadas y hay que ir rompiéndolas para sacar trozo a trozo". Pero que clase de chapuza es esa????
En fin, debía de dolerme tanto que accedí a que el tío me sacase las muelas. Pero que empiece con las de arriba, dejamos lo divertido para el final.

Así que fuí otro día y me sacó una de arriba. No hace falta decir que durante unos días me parecía demasiado al chavo del ocho. Por no hablar del moratón que me salió después, que parecía la matona del barrio. Pero me arremangué y fuí a que me quitaran la segunda (de arriba también). Otro tanto de lo mismo, tirones a lo bestia, dolor, y de nuevo el chavo del ocho y Rocky Balboa.

Asi que cuando me propuso poner cita para ir a quitarme una de las de abajo, recordé que me había dicho [voz con eco del pasado ON] "las de arriba no te dolerán tando, pero las de abajo si..."[voz con eco del pasado OFF]...puse una excusa para salir de allí lo más rápido opsible, y hoy en día, unos 7 años mas tarde, mis muelas del juicio inferiores siguen aqui, conmigo. Y me lo recuerdan de vez en cuando.

Algún día me las quitaré, que me noqueen y les dejo hacer lo que quieran con mis muelas, de mientras, me toca aguantarme y poner entradas de blog contando mis penurias. Y si es como la última vez que me empezó a doler la muela, ni tan mal, algunos ya sabreís la historia, asi que no la voy a contar ahora.
Vale, es una excusa, no me acuerdo muy bien como fué, pero acompañé a ama al médico y By the way le dije que me recetase algo para el dolor de muelas que se había extendido, como ahora, hacia el oído y las anginas. Total, que salimos del médico ama y yo, cada una con sus recetas para medicamentos y sendas citas para OJO: LA ANTITÉTANICA (dosis de recuerdo) para las dos y LA VACUNA DE LA GRIPE para ama. Ah y también de regalo, un chiste malísimo sobre mis hábitos sexuales por parte del médico y descojono de mi madre por mi cara de flipe. Fué surrealista. Fuimos desde el ambulatorio hasta casa con un descojono que parecía que estabamos de txikiteo.

En fin,...como está la sanidad!

Ah! Txatx, la historia del despertador de esta mañana la dejo para otro día, que hoy me he ido por las ramas, creo que me estoy pareciendo cada vez más a ti.