jueves, 19 de junio de 2008

Las cosas de Ikea

Ikea tiene muchos inventos, algunos mejores y otros peores, pero lo que es más importante, la mayoría, baratos.

Cuando llegue aquí, mi cuarto era un espacio vacío y desesperanzador con una especie de colchón con patas colocado exactamente en el medio del cuarto vacío (tan vacío que hacía hasta eco), un espejo redondo colgado en una pared al lado de una lámina de Kandinsky, una televisión sobresaliendo de un soporte en lo alto de una de las cuatro esquinas y una lámpara colgando exactamente encima del colchón con patas (duro como una piedra). Y ni siquiera tenía maletas para adornar un poco el vacío de esos 15 metros cuadrados, estaban en el limbo de las maletas que hacen transbordo en Heatrow.
Asi que, como no tenía mejor sitio adonde ir y esa iba a ser mi casa durante 9 meses, empujé el colchón con patas hacia una de las paredes (me daba cosa dormir así, en el medio del cuarto, como si estuviera en una isla, necesito un tope, como los bebes que buscan el tope de las barras de la cuna) y me quedé sopa en 0,3 segundos.
No me cuesta mucho quedarme dormida, siendo sinceros, tengo una facilidad pasmosa para quedarme dormida, ni la verticalidad me asusta si tengo sueño.

Al día siguiente, era primer domingo de mes y las tiendas de Utrecht estan abiertas asi que detrás del volante de un coche familiar alquilado busqué el camino al imperio sueco de Ikea para acabar con el desolador espectáculo de mi habitación. Entre muebles, ropas de cama y un tupperware, llegó a mi vida holandesa un despertador. El despertador. Verde, por supuesto, con grandes números y un enorme botón al que pegas un manotazo por la mañana y consigues dormir 5 minutos más. Incluso si consigues encadenar 6 series de 5 minutos con sus consiguientes 6 manotazos puedes dormir media hora más y como extra, consigues mantener la línea porque con a consecuencia de esa media hora más retozando en la cama, no tienes tiempo de desayunar y encima tienes que dar pedales a toda leche si quieres llegar a tiempo al trabajo.

Pero no acaban ahí las maravillas del despertador de Ikea, además del consabido Pi Pi Pi Pí! de los despertadores normales, el despertador Ikea tiene la opción de grabar un mensaje (a ser posible amenazador, para que surta efecto) que será el que te despierte (a no ser que le pegues un manotazo al boton enorme).

Y,…si, cuendo PacoMartinezSoria (A.K.A. ElTxorboDeLaSudaderaDeRayas, A.K.A. Mister Lekeitio) estuvo de visita aproveché para que me grabara un mensaje en el despertador. Que bonito! Suena asi:

AMORE, VENGA! ESPABILLA!!BIHARRERA!!!!

Según lo grabó se arrepintió y me pidió que lo borrara:

- Joer tía, me vas a coger manía!

Claro, yo, muy en mi papel, le dije que no, que no le iba a coger manía por eso. Que sería bonito escuchar su voz por las mañanas, como si estuviera aquí,…

Amore, no te he cogido manía ni te he dejado de querer, solo que por las mañanas,…te quiero diferente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si es verdad, al de un tiempo se le coge hasta cariño. Y pasado un poco de tiempo hasta le hechas de menos. AMORE!VENGA ESPABILA!! BIHARRERA!!!!
Es mas creo que yo tambien me voy a comprar uno y le voy a grabar TUDECRAZIIIIIIIII!!!!!!